Recetas Tradicionales


LOS PESTIÑOS DE MI ABUELA

Mi abuela a la que llamábamos cariñosamente "mamaisca" (de mamá y Francisca), hacía una receta de pestiños que ha pasado de generación en generación a las mujeres de la familia. Yo los comía de pequeña cuando mi abuela los hacía y después, de mi madre, que es la que se preocupa mucho para que las recetas caseras de la familia no se pierdan, a veces se pone un poco cansinilla con que nos metamos con ella en la cocina para aprender las recetas, pero en el fondo... lleva toda la razón del mundo.

Estos pestiños son muy especiales porque la receta es supersencilla pero el tiempo que se invierte en hacerlos no es tan fácil de encontrar entre la multitud de cosas en las que a veces estamos inmersos.

Cada vez que en el cole hacemos "Jornadas Gastronómicas" mi aportación es siempre la misma: " los pestiños de la madre de Mariló", aunque ya hace tiempo que también son míos. Mañana tenemos las primeras del curso escolar, la verdad es que han tardado en llegar, casi siempre coinciden con algún evento especial y esta vez no iba a ser menos: nuestro compañero Joaquín va a ser trasladado a su querida Córdoba, así que para que no eche de menos mis pestiños, aquí le dejo la receta.

Ingredientes:
- 1 vaso de aceite de oliva virgen extra desahumado, es decir, se pone el aceite a calentar y cuando esté echando humo se aparta del fuego y se le añaden dos cucharadas de matalauva y una cáscara de limón. A continuación se cuela este aceite para ir incorporando los siguientes ingredientes.
- 2 vasos de vino blanco (cuanto mejor sea el vino, mejor sabor tendrán).
- Harina (la que admita) ¿¿¿¿qué?????, sí, sí, la que admita. Yo ya estoy acostumbrada porque las recetas que aprendo de mi madre son todas sin medición.
Pero la cosa es ir echando harina hasta que se pueda trabajar con la masa sin que se pegue a los dedos ni a la encimera de la cocina y sin necesidad de echar harina para que no se pegue en ella.
- Azúcar, la que necesites. La misma historia de antes, jajajajjjj
Cuando la tengamos lista, la envolvemos en un paño de cocina y la dejamos reposar unos 15 minutos, a temperatura ambiente.


Luego cortamos un trocito para ir trabajándolo y lo demás lo dejamos bien tapadito, a temperatura ambiente.


La masa tiene que quedar bien fina porque si no es así se quedarán apelmazados y al freirlos...no subirán, no se quedarán infladitos.
Mucha gente pregunta cuando come estos pestiños que cuánto bicarbonato se le echa y la respuesta es:  NINGUNO, NADA DE NADA.

Cuando los cortamos, los metemos en la sartén con Aceite de Girasol a fuego fuerte y su respuesta será la de inflarse un poquito.



Cuando los saquemos, los ponemos a escurrir para que luego al pasarlos por el azúcar, ésta no se quede a "pegotones".



Mucha gente hace una mezcla de azúcar y canela, pero estos sólo llevan azúcar, en cuestión de gustos...


Y... este es el resultado final!!!!!! 


Ahora si no los haces... es porque no quieres... y te gusta más que yo los lleve metiditos en su caja, listos para degustar.



TIRAMISÚ CLÁSICO ITALIANO POR MARÍAGRACIAGRAZIA BIANCO " Una latronichese"

Recetas de Tiramisú hay muchas, cientos, miles.... creo que ocurre lo mismo que con el gazpacho, salmorejo, etc... todo el mundo sabe hacerlo porque lo único que tiene que hacer es leer aquí y allá. 
Siempre he tenido ganas de hacerme con una receta de tiramisú clásico que fuese lo más parecido posible al que pudiera hacer un italiano o italiana de a pie en su propia cocina.

Maríagrazia Bianco es una joven italiana que ha sido la madrina de Daniel (el niño al que le he hecho las galletas de bautizo) y por supuesto no he podido dejar escapar esta oportunidad única. Le pregunté si sería tan amable de explicarme cómo se hace el tiramisú, de decirme los ingredientes, etc... a lo que me contestó: Prima di partire, noi e ti insegnano a farlo (Antes de marcharme, quedamos y te enseño a hacerlo), así que dicho y hecho.

Respecto a los ingredientes he de decir que me sorprendió bastante el que no se encontrara entre ellos algún tipo de licor. Casi siempre le ponen "Amaretto",o coñac (en caso de no tener el anterior) o peor aún whisky.
En cuanto al chocolate, ha de ser cacao puro en polvo, no vale echarle: sucedáneos de chocolate y ni pensar en el cola-cao...
El queso ha de ser "Mascarpone", nada de queso de untar philadelphia...
Los bizcochos no pueden ser de soletilla se ponen demasiado blandos.

Para hacerlo necesitamos:
5 yemas de huevos.
5 cucharadas grandes de azúcar.
500 grms. de Mascarpone.
500 grms. de Nata líquida para montar. Se puede utilizar nata vegetal pero el tiramisú saldrá más dulce.
300 grms. de Bizcochos Savoiardi (son los bizcochos duros).
Café solo.
Cacao puro en polvo.

Para la elaboración procederemos de la siguiente forma: A las cinco yemas de huevo le añadimos cinco cucharadas grandes de azúcar blanca aunque también se puede hacer con azúcar moreno. Se baten y se le añade el queso mascarpone, a continuación seguimos batiendo. Esta mezcla se reserva.

En un bol de aluminio (mejor si ha estado un ratito metido en el frigorífico) se monta la nata que debe estar bien fría. Se puede utilizar nata vegetal pero hemos de tener en cuenta que entonces el Tiramisú nos saldrá más dulce ya que esta nata lleva incorporada azúcar.

A la primera mezcla que hemos reservado le añadimos la nata ya montada y batimos todo junto.

En una bandeja cubrimos la base con la crema resultante y comenzamos a poner los bizcochos que previamente vamos mojando en el café (si van a comer niños se puede hacer descafeinado).

La forma de mojar los bizcochos también es importante porque si se mojan mucho entonces se van a deshacer y va a quedar un tiramisú extremadamente blando. Los bizcochos se introducen en el café de manera horizontal y sólo hasta la mitad, de esta forma la mitad de abajo se queda mojada de café y la mitad de arriba sigue quedando durita, aunque con el paso de las horas se irá empapando de los bizcochos vecinos y adquirirá la textura deseada.

Los bizcochos se colocan dejando entre ellos el suficiente espacio para que en la capa superior podamos introducir otro bizcocho, no se si esto lo he explicado muy bien...

Cuando acabamos de poner todos los bizcochos, cubrimos con la mezcla y espolvoreamos con cacao puro en polvo. Se echa el cacao en un colador y se le dan golpecitos para ir cubriendo toda la bandeja.
Seguimos mojando bizcochos y ahora los colocamos en los huecos que hemos ido dejando en la parte de abajo, pero no hay que empujar hacia abajo.

Cuando terminamos cubrimos otra vez con la mezcla y espolvoreamos con el cacao en polvo.

Podríamos seguir poniendo capas pero entonces nos va a ser muy difícil cortar el Tiramisú y habrá que hacer  malabarismos para que el trozo no se venga abajo una vez servido en el plato.

Otra opción es hacer Tiramisú individual en cuencos pequeñitos, o en copas o en cualquier otro recipiente, quedando así con una presentación envidiable y muy kuki.

Pronto habrá fotos...


No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡¡Tu comentario me interesa!!